Un Guardabosques vivía en un bosque del suroeste de los
Estados Unidos, con su esposa, ellos dos deseaban tener un bebé durante 7 años,
y lo único que tenían era a Sam, un pastor alemán, Sam en varias ocasiones
salvó a las gallinas y a la mujer de su mejor amigo de tres hombre ebrios, le
tenían un gran cariño, pero él no podía rellenar ese vació.
Pero un día la mujer del guardabosques quedó embarazada, los
dos no lo podían creer estaban tan felices y emocionados, compraron un varias
cosas para la ansiada criatura, juguetes, diversas ropas, adornos para su
cuarto y una hermosa cuna.
Ya después de que el niño naciera el perro se mostraba
celoso por ya no ser el centro de mimos, caricias y atención , pero nunca le
gruño al bebé se mantenía fiel y obediente. Luego llegó el día que el
guardabosques jamas olvidará, una tarde su mujer salió a reunirse con unas
viejas amigas en el pueblo, el bebé estaba durmiendo, y recibió una llamada que
le decía que unos cazadores estaban disparando cerca de ahí, el hombre salió
con una escopeta y le ordenó al perro que cuidase del niño de ya 9 meses, pero
justo antes de salir su esposa lo llamó y le dijo que ya estaba llegando así
que la criatura se quedara máximo 15 minutos solo.
El guardabosques al volver rápido, debido a que los
cazadores escaparon, se encontró con Sam ensangrentado y con espuma en su boca
( u hocico, como le digan ustedes) en la puerta del cuarto de bebé y cuando
entró vio todo su cuarto desordenado, la cuna estaba tumbada y todo estaba
manchado de sangre, sangre que el perro trataba de limpiarse de sus patas, el
hombre comprendió que el perro espero su ausencia para cometer tal cosa, con
lagrimas en sus ojos el señor agarró la escopeta y disparó contra Sam, antes de
que el perro cayera muerto se escuchó un gemido de dolor para luego desplomarse
en un charco de sangre, por el sonido que provocó el arma se escucho un llanto,
era su hijo que estaba dentro de la cuna tirada, y entre las sabanas se
encontró con una serpiente de cascabel muerta, después de eso el hombre puso a
su bebé dentro de la cuna, que ya había puesto de pie, y abrazó a su mejor
amigo y lloró como un niño hasta que su esposa volvió y e contó lo sucedido,
dicen que el hombre gastó todos sus ahorros para enterrar a su leal amigo.
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